Nada, de Carmen Laforet

Nada es una novela de la célebre escritora española Carmen Laforet, galardonada con el Premio Nadal de 1945 (el mismo año de su publicación). El personaje principal de esta pieza es Andrea, una estudiante universitaria recién llegada a la casa de unos familiares en Barcelona. Allí, la protagonista pretende completar su formación académica y encaminarse hacia su independencia personal.

Pero se trata de un entorno rebosante de penurias durante el período de posguerra franquista. Por ello, algunos de sus otrora acaudalados parientes evidencian serios problemas psicológicos y, en consecuencia, la convivencia se vuelve muy conflictiva. Eventualmente, la chica tiene la posibilidad de superar todos esos escollos gracias al apoyo de sus compañeros universitarios.

Sobre la autora

Infancia y juventud

Carmen Laforet Díaz nació el 6 de septiembre de 1921 en Barcelona, Cataluña, España. Fue la primogénita del matrimonio entre un arquitecto catalán y una docente toledana. En 1924, su familia se trasladó a Gran Canaria debido a asuntos laborales de su padre (era instructor de peritos industriales).

Allí nacieron sus hermanos menores Eduardo y Juan, con quienes mantuvo un buen vínculo durante toda su vida. Regresó a Barcelona cuando cumplió 18 años para estudiar Filosofía y Letras, primero, así como Derecho después. Sin embargo, no culminó ninguna de las dos carreras.

Una ilustre carrera literaria

Tras cumplir 21 años, la joven Carmen se mudó a Madrid. Estando allí conoció al crítico literario Manuel Cerezales, quien la alentó a escribir. De esa manera, Laforet publicó su primera novela en 1945, Nada, aclamada por la crítica y galardonada con el Premio Nadal. Por otra parte, con Cerezales estuvo casada entre 1946 y 1970, la pareja tuvo cinco hijos.

En 1948 recibió la distinción de la Real Academia, tanto por su ópera prima como por su sucesora, Premio Fastenrath. De hecho, durante las siguientes tres décadas de trayectoria literaria acumuló numerosos premios y homenajes. Los cuales, han continuado después de su muerte, ocurrida el 28 de febrero de 2004, en Majadahonda (Comunidad de Madrid), a causa del Alzheimer.

Galardones

Aparte de las mencionadas Nada y Premio Fastenrath, la autora catalana consiguió el Premio Menorca de Novela y el Premio Nacional de Literatura por La mujer nueva (1955). Asimismo, Laforet creó una vasta colección de novelas y cuentos cortos. Solo dejó de escribir cuando comenzó a sufrir problemas de memoria por su padecimiento, por lo cual, se alejó de la esfera pública.

Otros títulos notables en la trayectoria literaria de Carmen Laforet

• ­­La isla y los demonios (1950). Novela.
• La insolación (1963). Primera entrega de la trilogía Tres pasos fuera de tiempo, seguida de Al volver la esquina (2004) y Jaque mate (no publicada).
• Carta a Don Juan (2007). Recopilatorio de todos sus relatos cortos.
• Romeo y Julieta II (2008). Recopilatorio de todos sus escritos románticos.

Análisis de Nada

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Antecedentes y contexto

La madre de Carmen Laforet murió algunos años después de dar a luz a sus dos hijos varones. Luego, el padre de la autora contrajo segundas nupcias con una mujer que resultó en un verdadero incordio para la joven catalana. Por esta razón, muchos de los protagonistas de la escritora barcelonesa son huérfanos (Andrea también).

Evidentemente, la Guerra Civil y la represión franquista aparecen igualmente reflejadas en el desarrollo de esta obra. Del mismo modo, este libro describe el enfrentamiento del idealismo de la juventud ante la decadencia de su entorno. Además —al igual que en otros textos de Laforet— la autora demuestra su visión feminista en complemento con su perspectiva de la fe.

Estructura y sinopsis

Nada es una novela dividida en tres partes claramente diferenciadas:

Planteamiento

Abarca los primeros diez capítulos. Relata la llegada de Andrea a Barcelona para comenzar sus estudios superiores. Conjuntamente, se describe la calle y la casa de su familia (llena de lujos en el pasado, en el presente es un lugar deprimente). Así como la personalidad de los trastocados personajes que allí habitan; las discusiones (algunas bien subidas de tono) y las intrigas son el pan de cada día.

Solamente su estricto tío Román (violinista) parece no interesarse por los asuntos ajenos. Poco a poco, Andrea va sintiendo la necesidad de pasar aislarse de toda la locura de su sitio de residencia. Por ende, pasa más tiempo en la Universidad, en donde hace nuevas amistades, entre ellos, conecta especialmente con Ena y Pons. Esta sección termina con el traslado de la tía Angustias a un convento.

Trabas

Va desde el capítulo 11 hasta el 18, en los cuales se agravan los problemas. Las discusiones en la casa familiar se tornan más escandalosas y violentas, causando algunas noches de insomnio a Andrea. Además, decidió pagar solamente el pan del desayuno para administrar mejor su dinero. Pero esto significa pasar hambre de vez en cuando.

Andrea, cuando no está en clases, pasa todo el tiempo que puede estudiando en la biblioteca. Entretanto va ampliando su grupo de amigos y le pide a Ena que no vaya a su casa, aunque luego la protagonista cambia de parecer. Aun así, surge una extraña relación entre Ena y el tío Román, a la par que inicia el cortejo de Pons hacia Andrea (si bien esta relación no florecería a largo plazo).

Resolución

Comprende desde el capítulo 19 hasta el final (25). Andrea comienza a relacionarse con la madre de Ena, quien tuvo un pasado idílico con Román. En el punto crítico de la historia, Ena revela a Andrea su verdadero propósito: humillar a Román en venganza por haber dejado a su madre. En el desenlace, Ena se marcha a vivir a Madrid y Román se suicida con una cuchilla de afeitar.

Hacia el final, la tía Gloria (quien era maltratada por su marido, Juan) recibe la visita de sus hermanas. Más, esas mujeres y Juan terminan acusando a la pobre Gloria de ser la causante de las penurias en la casa, incluyendo la muerte de Román. La novela cierra con Andrea despidiéndose de todos sus familiares. Se marcha a Madrid, invitada por su amiga Ena y con una promesa de trabajo.

Temas

Carmen Laforet expone en Nada distintos puntos de vista referentes a la desigualdad social a través de la relación de sus personajes (Ena, de familia acomodada, y Andrea). La venganza es otro móvil en la historia, encarnada por Ena y consumada con la muerte de Román. Tampoco faltan las desilusiones amorosas y las tramas engañosas.

No obstante, el aspecto más impactante de Nada es la denuncia implícita por el maltrato doméstico sufrido por Gloria. Pues —como sucede en muchos casos reales— expone la complicidad necesaria de otros familiares, porque Juan solo busca excusas para agredirla debido a sus problemas.