La sociedad del cansancio (Herder, 2010) es un ensayo del pensador Byung-Chul Han. Se ha convertido en bestseller por ser una obra pertinente, escrita con claridad, en la que la sociedad se ha visto reflejada. La rigurosidad de este autor surcoreano que escribe en alemán lo ha posicionado como uno de los referentes modernos del pensamiento occidental.
El libro es un tratado perspicaz que expone uno de los grandes males del nuevo siglo y milenio: el cansancio que ocasiona nuestro ritmo de vida y la determinación de una positividad y una felicidad forzada que hemos asumido y que rige nuestras vidas. Este es un ensayo actual sobre los excesos de la positividad.
La sociedad del cansancio: los excesos de la positividad
Hasta la extenuación
La sociedad del cansancio es un tratado filosófico escrito con un lenguaje claro, pero siguiendo la hoja de ruta de grandes pensadores, como Nietzsche, Heidegger o Kafka. Claro que Han da su propia visión de la dinámica moderna sobre la sociedad, la economía y la salud. La clave de su tesis se encuentra en el acelerado rumbo que está tomando nuestras vidas que nos lleva hasta la extenuación. Es una especie de secuestro, pero con síndrome de Estocolmo. El autor explica que quienes nos tenemos retenidos somos nosotros mismos. La sociedad del siglo XXI está empeñada en llegar al límite en todo cuanto hace, y muy especialmente en lo que se refiere al terreno laboral. La productividad y el rendimiento se han convertido en lo esencial de nuestra existencia, y sobre ello gira todo lo demás. Lo que seamos capaces de ofrecer al mundo es el motor de nuestros días, aunque por ello lleguemos hasta la extenuación.
Han llega a la conclusión de que la actividad sin pausa a la que está sometido el hombre ha saltado del opresor al oprimido. En la actualidad ya no se necesitan jefes voraces que mantengan firmes a sus empleados, porque ahora son los trabajadores los que se desgastan en ser los mejores y en conseguir objetivos y metas que absorben todo su tiempo. La sociedad está cansada, pero se encuentra en una espiral insaciable por dar siempre más, porque se ha creído eso de que todo es posible. Si quieres puedes y ese tipo de consejos. Siempre se puede producir más, y ser el mejor en aquello que se hace. En esto tiene mucho que decir el capitalismo, que es el sistema económico imperante en Occidente.
Productividad patológica y positividad
La forma que tiene de producir el neoliberalismo económico es causa directa de que el ser humano no encuentre paz en el descanso, en el ocio. O que ni siquiera sepa lo que es descansar, en realidad. Porque el hombre produce, gana, gasta, y vuelve a producir. En los últimos años todo el mundo parece rehuir con cierta culpabilidad de ese falso tiempo libre que todavía existe. Esto es lo que ha desembocado en trastornos patológicos que la gente sufre de diferentes maneras. En el libro se mencionan trastornos cada vez más habituales como la depresión, el déficit de atención, la hiperactividad, el trastorno límite de la personalidad o el síndrome de desgaste ocupacional o burnout.
Diferentes eras, diferentes problemas, comenta el autor en La sociedad del cansancio. A pesar de haber pasado por una reciente pandemia mundial, esta época no tiene en la salud física su principal amenaza, sino en mental. Además de las patologías mencionadas, el tipo de vida que llevamos con el mal uso de las nuevas tecnologías (que ya no son tan nuevas) ha dado lugar a una nueva esclavitud, o epidemia. La gente tiene problemas para concentrarse, para encontrar el sosiego en el sano esparcimiento o para apreciar el arte. El aburrimiento ha llegado a su fin, y con él, la frustración o la aceptación de lo malo. Al contrario, impera la positividad, falsa, por otro lado. Porque hombres y mujeres se han convertido en esclavos del trabajo y del sistema. Han aceptado que si no triunfan es porque no han dado lo suficiente de sí mismos. Son, por tanto, unos fracasados.
Conclusiones
La sociedad del cansancio es un tratado filosófico perspicaz que habla con llaneza de uno de los problemas del siglo XXI: el hartazgo producto del sistema capitalista. La cuestión que plantea Han es que la sociedad se ha convertido en esclava sin darse cuenta de que también es su propia ama. Ahora la gente vive de una manera más acomodada, sus necesidades están cubiertas, tienen formación superior, miles de cosas bonitas, o pueden viajar por el mundo con una facilidad inimaginable hace solo unas décadas. La sociedad es víctima del sistema, o lo que es lo mismo, víctima de sí misma. Porque a pesar de todos estos avances, su rutina la ha convertido en reo de la positividad y del rendimiento absolutos.
Sobre el autor
Byung Chul-Han nació en Seúl en 1959. Cursó estudios de Filosofía en la Universidad de Friburgo y de Literatura alemana y Teología en la Universidad de Múnich. Es doctor después de haber realizado una tesis sobre Martin Heidegger y ha trabajado como docente en diversas universidades alemanas. Es autor de varios libros de cuya publicación en español se ha ocupado Herder Editorial. Aunque llegó a Alemania muy joven sin saber el idioma, esta es la lengua que ahora usa para sus trabajos que son reconocidos dentro del pensamiento occidental de nuestro tiempo.
Otros libros del autor son: La expulsión de lo distinto, La sociedad palatina, Capitalismo y pulsión de muerte, La desaparición de los rituales, Buen entretenimiento, Loa a la tierra, El corazón de Heidegger, Caras de la muerte, Hegel y el poder, Muerte y alteridad, Hiperculturalidad, Sobre el poder, La salvación de lo bello.