La campana de cristal es un libro de la autora estadounidense Sylvia Plath publicado en 1963. En un primer momento se publicó en Inglaterra en este año con un seudónimo, el de Victoria Lucas. En 1971 llegó la publicación a Estados Unidos. Plath es conocida como poeta y este trabajo es la única novela que ha publicado.
Tiene la particularidad de ser una especie de autoficción, pues se ha comparado a la protagonista de la narración con la experiencia vital de la autora. Navegando en acontecimientos autobiográficos, en esta novela Sylvia y Esther (el personaje de La campana de cristal) arrastran sendos desequilibrios comunes que definirán el destino de ambas.
La campana de cristal: las vidas de Sylvia y Esther
Cuando el aire se vuelve imposible de respirar
Esther Greenwood es una joven que tiene todo para ser feliz. Al menos, en apariencia. Además de un novio apropiado y estudiante de medicina, de una vida que parece resuelta, y de juventud, acaba de obtener una beca que le permitirá vivir el sueño de su vida en Nueva York. Tiene la oportunidad de conocer cómo es una publicación de moda por dentro y podrá escribir en ella. De lo que se trata es de la escritura, eso a lo que siempre había aspirado dedicarse.
En su interior, sin embargo, nada está afianzado, y así se percibe desde el principio de la narración. No está a gusto en la gran ciudad en un entorno que observa hostil para las mujeres. Cuando Esther vuelve a su lugar de origen, todo en ella se tambalea por completo y se enfrentará al abismo, después de haber vivido la asfixia y la angustia en un mundo en el que como mujer no se sentía libre ni reconocida.
La campana de cristal se trata de un texto bastante lírico y metafórico debido al carácter poético y trayectoria de la autora. Se encuentra enmarcado dentro de las ideas feministas de la época que enganchan con el ideario actual sobre la posición de la mujer en la sociedad. Una campana de cristal es un habitáculo cerrado en el que el aire no se renueva y el acto natural de respirar se vuelve denso y cada vez más difícil de llevar a cabo. Con el trágico final de Esther asistimos a la funesta premonición, al grito desesperado, de la propia Sylvia Plath.
Desdoblamiento
¿Puede entonces hablarse de la existencia de un alter ego en la novela? Mucho se ha discutido sobre las similitudes entre Sylvia y Esther y en cierto modo la autora usa en su única novela conocida a un personaje de ficción para expandir su mundo interior más allá de la poesía. Su literatura resulta muy intimista y esta novela es el último testimonio de una escritora atormentada.
Asimismo, la protagonista anhela liberarse de las convenciones sociales que atrapan a la mujer en el terreno familiar y social, profesional y sexual. Todo ello en un mundo cuadriculado y preparado para una continuidad patriarcal. Además de los condicionantes exteriores a los que Sylvia Plath se veía sometida, se encuentra el trauma personal. Los personajes secundarios también sirven a la escritora para marcar la distancia con sus propios seres queridos. Como en el caso de su madre, que también está retratada en la madre de Esther.
A los temas tratados se le suma un discurso íntimo que otorga a la novela un carácter individual que deja asomar a la autora a través del personaje de Esther. No hay duda de que hay un tipo de desdoblamiento entre la autora y el personaje. La necesidad de Plath de expresar de otras maneras su perspectiva y su malestar se transforma en un trabajo literario que inevitablemente revela el talento literario de Plath, así como su desbaratado estado mental, hastiado y desesperanzado. Como resultado se obtiene un relato en ocasiones incoherente que refleja los sentimientos de la autora.
Conclusiones
La campana de cristal es una novela que puede ser algo desordenada o incoherente, que adquiere todo el sentido cuando se comprende a Sylvia Plath y a su alter ego, Esther. Es la única novela de la poeta estadounidense en la que puede dar rienda suelta a su necesidad de expresión y de creación de manera diferente a como lo había estado haciendo. Tras la publicación de la novela, Plath se suicida y La campana de cristal se convierte en grito desesperado, en último testimonio de una autora que defendió en su trabajo el feminismo y mostró abiertamente la lacra que son las enfermedades mentales.
Sobre la autora
Sylvia Plath nació en Boston en 1932. Fue una poeta que también escribió relato, ensayo y una única novela que es considerada uno de sus mejores trabajos. Junto a La campana de cristal, destacan sus poemarios El coloso, Ariel o Cruzando el agua. En prosa también son relevantes los diarios escritos por la autora que vieron la luz con el título Los diarios de Sylvia Plath.
Por otra parte, hay que destacar que muchos de sus trabajos fueron editados de manera póstuma ya que Plath falleció muy joven después de un suicidio. Esta autora sufrió la temprana muerte de su padre durante su niñez y aparejada a su talento creador también estuvo la depresión que la acompañó toda su vida. Obtuvo una beca que la llevaría hasta Inglaterra; y allí conoció a su esposo, el célebre poeta inglés Ted Hughes, del cual se separaría no mucho tiempo después.
Diagnosticada con un trastorno bipolar se suicidó un mes después de la publicación de La campana de cristal, en el año 1963. De manera póstuma recibió en 1982 el Premio Pulitzer de poesía.