El viaje de Shuna
El viaje de Shuna —o Shuna no Tabi, por su título original en japonés— es un manga de aventura y fantasía creado por el icónico director de cine de animación, productor, ilustrador, mangaka, animador y empresario nipón Hayao Miyazaki, quien es más conocido por el ser cofundador de Studio Ghibli. La obra que compete a esta reseña fue ilustrada por primera vez en 1983, pero no salió a la venta para el extranjero sino hasta el pasado 27 de octubre.
Este cuento ilustrado del creador de obras maestras como El viaje de Chihiro, El castillo ambulante o La princesa Mononoke, fue publicado en japonés por la editorial Tokuma Shoten, y por Salamandra Graphic para España. Su lanzamiento coincide en año con el estreno de El chico y la garza, la última película de la que estará a cargo el maestro antes de su retiro.
Un cuento traído desde el pasado
La premisa de todas sus grandes historias
A lo largo de los años, Hayao Miyazaki ha sabido brindar al público algunos de los relatos más conmovedores de los últimos cuarenta años. Todas sus historias parecen estar movidas por los mismos hilos conductores: un profundo amor por la naturaleza y los seres vivos, mujeres fuertes y determinadas que se sobreponen a las más crudas circunstancias, la pobreza, el valor de la amistad, las consecuencias ambientales de la industrialización, y la guerra.
Así lo ha demostrado desde sus primeras hasta sus últimas producciones, como Nausicaä del Valle del Viento y Se levanta el viento, respectivamente. En el caso de El viaje de Shuna no es diferente. De hecho, podría decirse que este manga es un magnífico pilar para comprender la filosofía del autor y su forma de ver el mundo, las cuales están plasmadas en todas sus producciones de manera indeleble.
El arte en El viaje de Shuna
De igual manera, el estilo artístico desarrollado por Miyazaki es muy característico, siendo El viaje de Shuna una puerta a uno de los primeros trabajos del cineasta.
Las páginas de la obra están compuestas por hermosos y delicados dibujos con técnica de acuarelas. Estos recuerdan mucho a los que, posteriormente, engalanarían su repertorio cinematográfico en Studio Ghibli, casa productora conocida por su calidad de animación, paisajes evocadores dibujados a mano cuadro por cuadro, paletas de colores armónicas y personajes femeninos menos “bellos” que la media en las películas animadas.
El viaje de Shuna está compuesto, casi en su totalidad, por dibujos. Las viñetas están presentes para hacer avanzar la historia de manera un poco más explícita, pero, en general, las ilustraciones de Hayao Miyazaki sustentan el relato por sí mismas, de modo que existen solo algunos diálogos dentro de la obra. En cuanto a los dibujos, estos son naturalistas, ricos en tonos pastel y colores fríos, con preponderancia de verdes y azules.
Sinopsis de El viaje de Shuna
La típica historia del viaje del héroe, pero al mejor estilo de Miyazaki
El protagonista de El viaje de Shuna es un muchacho que ha heredado una tierra donde nada florece. El joven está condenado a ver cómo su gente trabaja de manera incansable para obtener poco más que unos cuantos granos. Sin embargo, un hombre anciano llega al lugar después de un largo viaje. Ya exhausto, con sus últimas palabras, le cuenta a Shuna la leyenda de unas semillas doradas que podrían hacer que la comida vuelva a crecer en su hogar.
No obstante, para obtener las semillas Shuna debe emprender un viaje hacia el lugar donde nace la Luna, un espacio de donde nadie jamás ha regresado. A pesar del peligro, el joven no lo piensa dos veces antes de lanzarse a la aventura, en la que deberá enfrentar temores inimaginables. A través de esta premisa se perciben dos de los tropos constantes de Hayao Miyazaki: el héroe solitario y la relación del hombre con el medio ambiente.
El cuento original detrás de El viaje de Shuna
Las producciones de Hayao Miyazaki siempre se han sentido más occidentales que las obras de la mayoría de los otros autores nipones. Sin embargo, el director también ha hecho apología de la cultura y las tradiciones de Japón y las regiones adyacentes a la tierra del sol naciente. Uno de esos casos se presenta en El viaje de Shuna, ya que este libro está inspirado en una leyenda tibetana conocida como El príncipe que se convirtió en perro.
La historia se aprecia de la mano del propio Miyazaki, quien se encarga de contarla en el prólogo de su libro. La leyenda reza sobre un príncipe que se ve agobiado por la miseria que atraviesa su gente a causa de la escasez de granos. Para aplacarla, comienza un largo viaje. Después de muchos problemas, consigue robarle algunos granos al rey serpiente, pero este lo maldice, convirtiendo al chico en perro. Más tarde, el heredero es salvado por el amor de una muchacha.
Sobre el autor, Miyazaki Hayao
Miyazaki Hayao nació el 5 de enero de 1941, en Bunkyō, Tokio, Japón. El cineasta es el segundo de cuatro hijos de una familia acomodada. Su padre era Miyazaki Katsuji, director de la empresa Miyazaki Airplane, la cual estaba encargada de construir timones para los aviones de combate A6M Zero. Las acciones del progenitor del autor se llevaron a cabo durante la Segunda Guerra Mundial, por lo que Hayao presenció algunas consecuencias de la batalla siendo aún muy joven.
Este hecho marcó para siempre al creador, quien, ya como director de animación, se dedicó a producir películas antibélicas con fuertes conceptos ambientalistas. La madre de Miyazaki Hayao enfermó de tuberculosis espinal cuando este comenzó sus estudios en la secundaria Omiya. La mujer pasó ocho años postrada en cama hasta que murió. Su deceso también inspiraría al autor en sus futuras obras.
El interés de Miyazaki por el arte siempre había estado allí, latente, pero creció durante su época de preparatoria, sobre todo después de ver una película llamada El cuento de la serpiente. Pese a que sabía que iba a estudiar Economía y Ciencias Políticas para seguir los pasos de su padre, el director se formó en artes, creando mangas que gozaron de buena acogida en Japón. Más tarde, comenzó a trabajar como dibujante en Toei Amimation, lo que le daría pie para crear Studio Ghibli muchos años después.
Filmografía de Hayao Miyazaki
- Shonen Ninja Kaze — Primer año estilo ninja (1964);
- Rupan sansei — Lupin III (1971);
- Rupan sansei: Kariosutoro no shiro — Lupin III: El castillo de Cagliostro (1979);
- Akage no an — Ana de las tejas verdes (1979);
- Kaze no tani no Naushika — Nausicaä del Valle del Viento /1984);
- Tenkū no shiro Rapyuta — El castillo en el cielo (1986);
- Tonari no Tótoro — Mi vecino Totoro (1988);
- Majo no takkyūbin — Kiki: Entregas a domicilio (1989);
- Kurenai no buta — Porco Rosso (1992);
- Mononoke Hime — La princesa Mononoke (1997);
- Sen to Chihiro no kamikakushi — El viaje de Chihiro (2001);
- Hauru no ugoku shiro — El increíble castillo vagabundo (2004);
- Gake no ue no Ponyo — Ponyo y el secreto de la sirenita (2008);
- Kaze Tachinu — Se levanta el viento (2013);
- Kimitachi wa Dō Ikiru ka — El chico y la garza (2023).
Como guionista o productor
- Taiyō no Ōji: Horusu no Daibōken — Las aventuras de Horus, Príncipe del Sol (1968);
- Nagagutsu o Haita Neko — El Gato con Botas (1969);
- Panda Kopanda — Panda Go Panda (1972);
- Omohide Poro Poro — Recuerdos del ayer (1991);
- Heisei Tanuki Gassen Pompoko — Pompoko (1994);
- Mimi wo sumaseba — Susurros del corazón (19945);
- Neko no ongaeshi — Neko no Ongaeshi (2002);
- Karigurashi no Arrietty (2010);
- Kokuriko-zaka kara — La colina de las amapolas (2011).