El género de terror dentro del anime sigue ganando adeptos entre los aficionados, especialmente cuando se enmarca en historias llenas de suspense y relaciones personales complejas. Una de las propuestas más intrigantes de esta temporada es la adaptación animada de “El verano en que Hikaru murió”, uno de los títulos más esperados que aterriza en Netflix el 5 de julio de 2025.
Nacida del manga homónimo creado por Mokumokuren, la historia se ha convertido en un fenómeno en Japón desde su lanzamiento en 2021. Ahora, salta a la pequeña pantalla con una versión que promete conservar la atmósfera inquietante y el carácter emocional que han cautivado a tantos lectores.
Una adaptación fiel al manga, pero con nuevas inquietudes visuales
El responsable de esta adaptación es Ryohei Takeshita, quien ya ha trabajado en otras series exitosas del género como «Jujutsu Kaisen». Takeshita ha declarado que uno de los principales retos ha sido trasladar el terror psicológico, la atmósfera densa y la sensación de amenaza latente presentes en el manga, intentando aprovechar al máximo las posibilidades que ofrece la animación.
En palabras del propio director, la serie no recurre a sustos fáciles, sino que construye su miedo a partir de la extrañeza y la tensión constante. El equipo creativo ha puesto especial énfasis en el sonido, la composición de escenas y el ritmo, para conseguir que el espectador experimente la misma incómoda incertidumbre que el protagonista.
Argumento: un verano trastornado por el miedo
La historia de “El verano en que Hikaru murió” gira en torno a Yoshiki y Hikaru, dos amigos de la infancia que viven en un pequeño pueblo aislado. Todo cambia cuando, tras una misteriosa desaparición en las montañas de Hikaru, Yoshiki empieza a notar que su amigo se comporta de manera extraña. Aunque por fuera parece ser el mismo, algo indefinible ha cambiado en él: hay una frialdad desconocida y gestos que no le son familiares.
La trama avanza entre sospechas, miedos y la percepción de que una presencia ajena ha tomado el control de Hikaru. Yoshiki, el único que nota estos cambios, debe enfrentar no solo la posibilidad de perder a su mejor amigo, sino el miedo de descubrir qué ocurre realmente con él. Se trata de un relato en el que el terror no reside solo en lo sobrenatural, sino en la incertidumbre y la soledad ante lo desconocido.
Los episodios, lanzados semanalmente en Netflix, irán desvelando el misterio que rodea a Hikaru, sumergiendo al espectador en una espiral de ansiedad y suspense que provoca una sensación constante de inquietud.
Producción, personajes y detalles técnicos
La producción corre a cargo de CygamesPictures, en colaboración con Kadokawa Animation y distribuida internacionalmente por Netflix. Además de Yoshiki e Hikaru, la historia incorpora a otros personajes secundarios, como Asako Yamagishi, Rie Kurebayashi, Tanaka, Yūta Maki y Yuki Tadokoro, que ayudan a enriquecer tanto la atmósfera rural como el trasfondo emocional de la obra.
El estreno internacional está previsto para el 5 de julio de 2025, y cada semana se lanzará un nuevo episodio simultáneamente en territorios como España, Latinoamérica y Estados Unidos. Para disfrutar de la serie, es imprescindible tener una suscripción activa a Netflix.
Estos son algunos de los datos clave de la serie:
- Título original: Hikaru ga Shinda Natsu
- Director y guionista: Ryohei Takeshita
- Compañías responsables: Cygames, Kadokawa Animation
- Distribuidoras: Netflix, Abema, Kadokawa Animation, Nippon TV
- Emisión: estreno el 5 de julio de 2025, con capítulos semanales
Un fenómeno de terror japonés que llega a todos los públicos
El manga de Mokumokuren ya era conocido por su enfoque innovador del terror, centrado más en la inquietud ambiental y emocional que en los sustos explícitos. La adaptación animada busca ampliar esa sensación de incomodidad, utilizando las ventajas visuales y sonoras del medio audiovisual para crear una experiencia todavía más intensa.
Los seguidores del manga encontrarán una fidelidad notable en los acontecimientos principales, pero también podrán disfrutar de nuevas capas de significado gracias al trabajo de Takeshita y su equipo, que ha querido potenciar la crudeza y el desconcierto originales.
Este estreno representa una de las apuestas más valientes del anime de terror reciente y apunta a convertirse en una cita imprescindible para quienes buscan historias que van más allá del miedo tradicional y apuestan por la introspección y el terror psicológico.
La llegada de este anime supone una buena oportunidad tanto para quienes siguen el manga como para los amantes del género, que encontrarán en “El verano en que Hikaru murió” una historia llena de suspense, emociones a flor de piel y una inquietud que permanece incluso después de acabar cada episodio.