Como en todo escritor que se precie, en García Lorca, sus inquietudes y preocupaciones quedaron plasmadas en sus obras con cierta recurrencia. En el siguiente artículo expondremos algunas de ellas:
El amor y el sexo fueron dos de los principales motores de la obra lorquiana. El primero de ellos es una especie de validación o justificación del segundo que muchas veces se esconde debajo de trabajadísimos símbolos que muchas veces nos dejan entrever la frustración del propio autor ante la represión del entorno ante la homosexualidad.
La muerte era otra de las obsesiones de Federico que veía sin embargo en ella un misterio que ejercía cierta atracción. Muchas veces la muerte está relacionada con la opresión de los sentimientos amorosos o eróticos como es el caso de Adela, la joven protagonista de «La casa de Bernarda Alba» que se acaba suicidando tras ver frustrada por el poder imperante de su madre su relación con Pepe El Romano.
Las injusticias sociales. En este caso no solo referidas a las opciones sexuales o a la libertad amatoria sino también a lo político o ideológico. La visión de Lorca al respecto es realista y por tanto pesimista ya que se da cuenta de cómo los indefensos llevan siempre las de perder en especial cuando sus ideas o sentimientos chocan contra las del poder.
Más información – Biografía de García Lorca
Foto – ABC
Fuente – Oxford University Press