La escritora y periodista sevillana Eva Díaz Pérez publicará el 22 de octubre Sevilla. Biografía de la ciudad dorada (La Esfera de los Libros), un volumen que aborda la capital andaluza desde la literatura, la investigación histórica y la mirada crítica. No es una guía ni un panegírico: la propia Sevilla toma el papel de narradora, con sus grandezas y sus grietas.
La obra presenta a la ciudad como un enigma cambiante, distinto en cada mirada. En ese espíritu, la autora reivindica la arquitectura de la memoria para leer calles, plazas y patios donde se superponen siglos de vida urbana, y donde conviven el esplendor y los lugares comunes que tantas veces la han simplificado.
Una biografía que levanta capas de tiempo
El relato recorre capas superpuestas de pasado: desde los vestigios de un templo romano a un palacio renacentista, pasando por la plaza donde se celebraban los autos de fe y el recuerdo del taller tipográfico asociado a la primera imprenta que viajó a América.
También emergen los restos de una gran mezquita y los planos, reales y literarios, que remiten a nombres como Cervantes o Cernuda, autores que injertaron en Sevilla parte de su biografía y de su obra.
El arco temporal es amplio: de los ecos del lago Ligustino a la Sevilla de los descubrimientos, de los alminares andalusíes a los palacios barrocos, y de los poetas del 27 a la ciudad contemporánea.
Un paseo para presentar el libro
Como anticipo, la autora organizó un recorrido por el centro que partió de la terraza del Hotel Inglaterra, donde fue desgranando episodios y escenas que atraviesan las páginas del volumen.
Esa propuesta, concebida para “leer la ciudad” a pie de calle bajo el prisma de la memoria, se completó con su paso por Hoy por Hoy Sevilla (Salomón Hachuel), espacio en el que compartió claves del proyecto y su método de trabajo.
- Plaza de San Francisco: corazón civil con el Ayuntamiento renacentista de Diego de Riaño y escenario de autos de fe.
- El Salvador: memoria de la primera mezquita mayor y huellas de la Sevilla primitiva.
- Plaza del Pan: vínculo con la familia de Luis Cernuda y su universo literario.
- Taller tipográfico: referencia a la imprenta sevillana que conectó con el salto a América.
- Casa de los Pinelo: sede de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, biblioteca y patio del siglo XVI.
Plaza de San Francisco, Cervantes y la Casa de los Pinelo
En la plaza de San Francisco, ese gran ombligo cívico, se levantó en el XVI el Ayuntamiento renacentista de Diego de Riaño, en un entorno donde se ubicaban patíbulos y se celebraban ceremonias de la Inquisición, todavía presentes en la memoria urbana.
En esa zona se situaba la cárcel donde, según la tradición, estuvo preso Miguel de Cervantes y donde habría bosquejado las primeras líneas del Quijote; para el autor, Sevilla funcionó como un laboratorio de la condición humana.
El itinerario hizo escala en El Salvador, con la memoria de la primera mezquita mayor, y en la Plaza del Pan, ligada a la familia de Luis Cernuda; el grupo se adentró después en la Casa de los Pinelo, hoy sede de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras.
Ese palacio, con su patio del siglo XVI y salones silenciosos, guarda una biblioteca donde el olor a madera se mezcla con el de los lomos antiguos; un enclave que testimonia el tránsito de la vieja ciudad de callejuelas y celosías a una Sevilla abierta a mercaderes de Flandes, Génova y Francia.
Tipógrafos, Pajaritos y el rastro perdido de Cromberger
La calle Pajaritos debe su nombre a una taberna popular del XIX que desplazó la antigua denominación de calle del Impresor; aún queda una placa que recuerda que en 1511 se instaló allí el taller del alemán Jácome Cromberger.
Pese a ese vestigio, en la ciudad no se conserva un conjunto material de aquella imprenta, a diferencia de Amberes, donde sigue en pie la de Cristóbal Plantino, referencia esencial para la historia del oficio tipográfico europeo.
Voces, contrastes y símbolos de una ciudad plural
El libro propone que la propia Sevilla sea protagonista de su historia, un enfoque que entronca con la tradición de las biografías urbanas como la de Ackroyd sobre Londres.
La narración se arma con objetos, sensaciones y personajes: un azulejo de catástrofes, el calor como elemento que disuadió asedios, y una galería con Murillo, Velázquez, Antonio Machado, Luis Cernuda, Cervantes o Chaves Nogales.
Todo ello subraya las dualidades que recorren la ciudad desde antiguo: de la devoción al inconformismo, de lo conventual a lo babilónico, y de un río real a otro imaginado que han condicionado su identidad.
- Devotos y heterodoxos
- Oficial y transgresor
- Sagrado y profano
- Esplendor y miseria
La lectura añade un desplazamiento cotidiano por barrios y tiempos, del Casco Antiguo a Rochelambert en la línea 24 de Tussam, como quien sigue el hilo de un mapa mental acumulado durante siglos.
La autora y el calendario
Eva Díaz Pérez, licenciada en Ciencias de la Información y redactora en Cultura de la edición sevillana de El Mundo, obtuvo el Premio de Periodismo Ciudad de Huelva en 1998 y es autora de títulos como El polvo del camino (2001), Memoria de cenizas (2005) o Hijos del Mediodía (2006, Premio El Público de Narrativa).
Miembro desde 2023 de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras, la escritora prolonga con este proyecto su investigación sobre la identidad urbana, cristalizada ahora en una biografía coral, literaria y crítica de la capital andaluza.
Sevilla. Biografía de la ciudad dorada llegará a las librerías el 22 de octubre; además de presentaciones y charlas, está previsto un acto en la Feria del Libro el domingo 26 para compartir con lectores las claves de esta propuesta.
Con vocación de crónica a pie de calle y mirada histórica, la obra entrelaza memoria y presente para mostrar tanto la Sevilla monumental como la doméstica, desde los símbolos más conocidos a rincones menos transitados, dibujando un retrato móvil de una urbe que rehúye quedar fijada en una única imagen.