Munera ha vuelto a convertirse en epicentro de la cultura manchega gracias a la celebración de la quincuagésima edición del Concurso Literario Molino de la Bella Quiteria. Este evento, que conmemora medio siglo de historia, reunió una vez más a escritores, autoridades y vecinos bajo la emblemática silueta del molino, manteniendo intacta la tradición del primer sábado de julio.
La edición de este año ha estado marcada por un sentido homenaje a Amparo Gavidia Murcia, cofundadora del certamen y figura clave en la vida cultural de Munera, recientemente fallecida a los 100 años. Su recuerdo estuvo muy presente durante toda la jornada, desde las palabras de bienvenida de Julia GarcÃa-Solana Carrizo, su nieta, hasta la decisión de dedicar la edición a su memoria y a su labor incansable en favor de las letras.
Un certamen único: sin premios económicos y con galardones artesanos
El Concurso Literario Molino de la Bella Quiteria destaca por su carácter singular. No reparte cuantÃas monetarias entre sus ganadores, sino que los premia con piezas artesanales elaboradas para la ocasión por Rubén Adrián Navarro, célebre ceramista conquense, y una navaja de prestigiosa tradición albaceteña. La entrega de premios se rodeó de un ambiente familiar y festivo, con la implicación de la familia GarcÃa-Solana Gavidia, organizadora del evento junto al Ayuntamiento de Munera, Diputación de Albacete y la Fundación Globalcaja.
La jornada arrancó con una representación teatral de Bravorante Producciones y el grupo local Despertares. Actores encarnando a Don Quijote, Sancho Panza y la Bella Quiteria dieron vida a la historia del molino, construido en 1975 e inspirado en la universal obra de Cervantes. Tras la teatralización, Julia GarcÃa-Solana Carrizo tomó la palabra para rendir homenaje a Amparo Gavidia, recordando su contribución a la educación y la cultura a lo largo de décadas.
Premios en prosa y verso: autores y obras galardonadas
El acto central del certamen fue la lectura del fallo del jurado, presentado por Daniel Sánchez Ortega y acompañado de emotivas palabras dedicadas a Amparo Gavidia. En la modalidad de prosa, el tercer premio lo obtuvo José AgustÃn Blanco con «Escarcha al amanecer»; el segundo fue para Sergio Generelo con «El vecindario»; y el primer premio, por segundo año consecutivo, recayó en Manuel Izquierdo Ruiz de Granada con «El testamento de Sancho Panza».
En categorÃa de poesÃa, el tercer premio fue para Pedro Manuel VÃllora con «MelancolÃa del campo»; el segundo, para Esteban Torres Sagra con «Crónica desde el castillo»; y el primer galardón, otorgado a Diego Caba GarcÃa por «Todo va de amor». Los ganadores recibieron una navaja albaceteña y una pieza de cerámica exclusiva en recuerdo de la efeméride.
El carácter internacional del certamen se consolidó una vez más, recibiendo originales no sólo desde distintos puntos de España, sino también desde Estados Unidos y, en pasadas ediciones, de paÃses como Luxemburgo, Italia, Alemania, Argentina o México.
Compromiso institucional y publicaciones conmemorativas
La celebración del cincuenta aniversario contó con la asistencia de autoridades provinciales y regionales, como los diputados José Antonio Calvo y Yolanda Ballesteros, el alcalde Desiderio MartÃnez y representantes de la Universidad de Castilla-La Mancha. Durante su intervención, el diputado José Antonio Calvo anunció la próxima publicación de un libro recopilatorio con las obras ganadoras de esta edición, asà como una reedición del «Diccionario Munerense» como forma de preservar el acervo lingüÃstico local, obra de la propia Amparo Gavidia. Para profundizar en las tradiciones locales, puede interesarte conocer el festival de literatura de Lanzarote 2025.
El evento también tuvo momentos de reconocimientos especiales. Julia Flores y Juan Lorenzo Collado, escritores y miembros del jurado, compartieron emotivas palabras para la familia organizadora. Además, se anunció la decisión del Ayuntamiento de Munera de poner el nombre de Amparo Gavidia al Auditorio Municipal, subrayando la huella indeleble que deja esta maestra y gestora cultural.
Tradición manchega y ambiente popular
Como es costumbre, la jornada literaria concluyó con una merienda popular. Los asistentes degustaron productos tÃpicos de la localidad: gachas, torreznos, pan, queso, rolletes de sartén y la tradicional cuerva, servidos desde las casas de Basilio El Pobre y Camacho El Rico, personajes inmortalizados por Cervantes en el Quijote y que dan más sentido aún al enclave y al certamen.
El origen del Molino de la Bella Quiteria se remonta a 1975, cuando Enrique GarcÃa Solana y Amparo Gavidia Murcia decidieron levantarlo en un paraje con fuerte arraigo cervantino y erigirlo como emblema de Munera. Hoy, además de museo etnográfico, el conjunto es referente anual del mundo literario manchego, donde el reconocimiento y el prestigio pesan más que la recompensa económica.
La edición número cincuenta del ha reflejado la solidez de una iniciativa cultural que, gracias al impulso familiar y el respaldo de instituciones públicas y privadas, ha sabido mantenerse viva y ganarse el aprecio de autores, aficionados y vecinos. El homenaje a sus fundadores, el apoyo a la literatura y la apuesta por preservar la identidad local han sido el hilo conductor de una celebración que sigue sumando historia y tradición a la vida cultural de la comarca.
