La capital asturiana se convierte cada año en el epicentro de la literatura de la región con la celebración de la Feria del Libro de Gijón (FeLiX), que este año ha reunido a decenas de editoriales y ha consolidado su estatus entre las grandes citas nacionales. El evento ha servido como punto de encuentro para lectores, escritores y editores, destacando por su diversidad editorial y la conexión directa entre quienes crean y quienes disfrutan la literatura.
La última jornada de la feria tuvo como broche de oro la entrega de los Premios Asturias Joven 2024, una iniciativa que visibiliza y fomenta la creación literaria de las nuevas generaciones. Estos galardones, convocados por el Instituto Asturiano de la Juventud en el marco del programa Culturaquí, destacan cada año a jóvenes autores en las categorías de poesía, narrativa y textos teatrales. En esta edición, han sido reconocidos Diego García Solís, Miguel Dopico Graña y Diego Lombardía, cuyo talento y propuestas frescas han sido objeto de atención tanto dentro como fuera de la región.
El acto de entrega de estos premios se ha celebrado en el patio central del Centro de Cultura Antiguo Instituto de Gijón, coincidiendo con el cierre de una feria que ha demostrado el dinamismo de la literatura asturiana. Cada galardón, dotado con 3.000 euros, lleva asociada la edición de la obra premiada y su distribución en bibliotecas, instituciones y librerías, incluyendo varios puntos en la Comunidad de Madrid, lo que permite que el talento joven asturiano cruce fronteras.
Un panorama editorial en auge y gran variedad de propuestas
La Feria del Libro de Gijón ha recibido elogios por la pluralidad y riqueza de su oferta cultural, logrando atraer a un público diverso y fiel. Tanto los profesionales veteranos como quienes se inician en el mundo editorial coinciden en que el sector asturiano atraviesa por un “momento estupendo”, con cerca de un centenar de participantes y gran presencia de editoriales locales y de fuera. El ambiente, descrito por editores como Alejandro Alvargonzález y Jorge Salvador, fomenta la interacción entre lectores y editores, propiciando un espacio de diálogo y descubrimiento literario.
Las editoriales asturianas, conocidas por su especialización y creatividad, van ganando cada vez más notoriedad. Desde apuestas de narrativa contemporánea hasta la difusión de literatura fantástica, el catálogo regional se diversifica y exhibe una vitalidad notable. Firmas emergentes como Duermevela, o nombres asentados como Hoja de Lata y Pez de Plata, aprovechan la feria no solo para mostrar su catálogo completo, sino para proponer autores asturianos y proyectos innovadores, lo que refuerza la identidad y proyección del sector.
Talento joven y oportunidades para nuevos creadores
Uno de los aspectos más destacados de esta edición ha sido el fuerte respaldo a la juventud creadora, tanto desde las instituciones como desde el ámbito editorial. La zona joven habilitada en la feria ha servido como punto de encuentro para los lectores y autores más jóvenes, quienes muestran una fidelidad y entusiasmo notables. Además, la distribución de los premios y la edición de las obras ganadoras aportan visibilidad y proyección, animando a más jóvenes a embarcarse en el mundo de las letras.
El director general de Juventud, Francisco de Asís Fernández Olanda, ha incidido en la importancia de apoyar a los creadores jóvenes, subrayando que estas iniciativas no solo distinguen el trabajo realizado, sino que constituyen un trampolín para futuras trayectorias literarias. El objetivo, según sus palabras, es “animar a otros jóvenes y crear así un encadenamiento de talento” que contribuya al crecimiento cultural de Asturias y a la aparición de nuevas voces.
Este ambiente de la feria y el interés del público demuestran que Gijón es una ciudad literaria y asturiana por excelencia. La participación de autores premiados y la implicación de los profesionales del sector evidencian una comunidad activa y dispuesta a seguir impulsando el panorama literario regional.
Tras varios días de intensa actividad y participación ciudadana, la Feria del Libro de Gijón se consolida como un referente para la difusión de la literatura asturiana, la proyección de sus jóvenes talentos y el fortalecimiento de un sector creativo que mira al futuro con optimismo y apertura, permitiendo que la cultura se desarrolle y se comparta más allá de las fronteras locales.