Joe Hill es uno de esos autores que solo podían escribir novelas de terror. Primero porque solo hay que verle la cara para que nos recuerde a alguien. Y segundo porque, efectivamente, ese alguien es su padre, Stephen King. Pero el chico quiso ocultarlo cuando empezó, por eso de las comparaciones siempre odiosas. Hasta que, una vez conseguido el éxito por sí mismo, ya no le importa que se sepa.
Joseph Hillstrom King ha heredado la sangre envenenada de terror y se ha labrado también una gran carrera como escritor superventas de un género que siempre atrae. ¿Que la sombra de su padre es demasiado grande? Bueno, hay gustos para todos. Y a quienes les gusta pasar un mal rato, que haya dos genios de la misma familia o puedan enganchar igual, pues mejor que mejor. Ahí va un repaso a algunos de sus libros.
Joe Hill
Llegué a Joe Hill un verano. Te vas de vacaciones y quieres lectura de evasión. Ya había debutado con El traje del muerto, de 2007, y, aunque ya he contado varias veces que no soy del género de terror, suelo leer algo de vez en cuando. Así que me llevé la edición de bolsillo para la playa. Y me gustó. También pasé mi mal ratillo, claro, y tampoco sabía aún que era hijo de Stephen King, de quien no he leído nada pero evidentemente he visto alguna de las mil adaptaciones de sus historias.
Hill va por el mismo camino, tanto de superventas como de versiones de sus libros para el cine. Lo sobrenatural más aterrador se combina con buenas tramas que atrapan y se leen bien, quizás sin tirar cohetes en cuanto al estilo o la digamos calidad narrativa. También ha trabajado el género del relato con Fantasmas, y el del cómic, con Locke & Key. Son varios títulos ya, pero repaso estos tres.
Algunos libros
El traje del muerto
Su novela de debut, cuenta la historia de Jude Coyne, una estrella de rock ya retirada. Vive en una mansión solamente con su representante y una novia mucho más joven que él. Y es coleccionista de objetos relacionados con lo sobrenatural. Esa afición lo llevará a pujar por un fantasma en una subasta por Internet y, unos días después, recibe una extraña caja en forma de corazón que contiene el traje del muerto. Y claro, ese fantasma, Craddock, no tardará en aparecer. Primero, de forma muy sutil pero enseguida se volverá muy amenazador. Cuando su representante se suicida, Coyne y su novia deciden huir para salvar sus vidas. Pero no será nada fácil.
Cuernos
Fue su segunda novela y en ella el protagonista es un hombre que un día se despierta muy resacoso después de una noche de juerga. Con horror, descubre que en la frente le han salido unos cuernos diabólicos y que, además, un poder sobrenatural le permite leer los pensamientos más inconfesables de los demás.
Fuego
Hill plantea un escenario casi apocalíptico donde una plaga de origen desconocido se ha extendido por todas partes. Los médicos la llaman «Trichophyton draco incendia», y para el resto del mundo es la escama de dragón, una espora que marca la piel de los contagiados con manchas negras y doradas antes de hacerles estallar en llamas. Y no hay cura ni antídoto.
La protagonista es Harper Grayson y es enfermera. Está casada, trabaja en un hospital y trata casos de enfermos a los que ve arder casi constantemente. Cuando se contagia, se queda embarazada y su marido toma una decisión drástica, Harper decide que quiere vivir y huye. Pero también conoce a John Rookwood, un supuesto bombero que, pese a estar contagiado también, no arde y ha aprendido a prender y usar el fuego a modo de escudo para las víctimas y de arma contra los que quieren exterminar a los contagiados. Los dos coincidirán en una especie de campamento escondido donde se refugian los enfermos.