«El juego de los abalorios» o la integración del todo…

Paisaje dibujado por Hermann Hesse

En esta obra de Hermann Hesse, «El juego de los abalorios» nos encontramos con el anhelo del propio autor de encontrar la manera de integrar el todo en un simple algo, en esta ocasión un juego, en el que caben los conocimientos científicos, culturales, musicales y de todo tipo ya que todo puede ser traducido al lenguaje de este juego.

La novela, que está situada temporalente en el lejanísimo año 2.400 se desarrolla en Castalia, la gran fuente del conocimiento, y cuna del mentado juego, en la que solo se entra por selección, algo que se lleva a cabo mediante un meticuloso seguimiento de todos los niños para descubrir a aquellos talentos excepcionales que merecen dicho honor.

Castalia, no obstante se está acomodando demasiado en su elitista y ficticio mundo y supone un gasto cuantioso para el estado lo que lleva al protagonista de la obra a reflexionar sobre la legitimidad de dicho lugar así como de sus normas y a contrastar su experiencia con gente del «mundo real», especialmente con aquellos que acuden como oyentes a Castalia pero que tienen vida fuera de allí, entre los cuales encontrará a su verdadero contrapunto, algo que le marcará de por vida y que estará siempre ligado a su destino…

Más información – «Siddhartha», de Herman Hesse

Foto – ABC


2 comentarios, deja el tuyo

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.

  1.   Bast Vicente dijo

    Si se junta la ingenuidad y picaresca en ocasiones del joven «Siddharta», la reserva y curiosidad de «Demian» y la independencia, pero preocupada actitud en el fondo de «El lobo estepario», sale con la madurez del tiempo una Santísima Trinidad llamada «El juego de los abalorios». Es una obra densa precisamente por lo último, la intención utópica ( o «madura») de conjuntar las ideas de siempre, de soñar casi una especie de «mundo ideal en un futuro lejano» – y con los imprevisibles inconvenientes que eso conlleva siquiera plantear- con una plasticidad literaria en el lenguaje, los textos amplios, y las «ideas suspendidas» al extremo del buen gusto para los amantes de la prosa estética. IMPRESCINDIBLE – teniendo en cuenta lo dicho.

  2.   douglas thielen dijo

    mi libro de cabecera….