Uno es don Pedro Calderón de la Barca, insigne dramaturgo y figura excepcional de nuestro Siglo de Oro. La otra es Anne Brontë, la menor de las tres hermanas británicas posiblemente más famosas de la literatura. Ambos nacieron un día como hoy. Calderón de la Barca lo hizo en Madrid, en 1600, y Anne Brontë en Thorton, Yorkshire, en 1820.
Don Pedro alcanzó las mayores glorias con sus obras para el teatro. Y Anne, pese a la mayor popularidad de sus hermanas mayores Charlotte y Emily, también destacó con su prosa. Pero ambos cultivaron el verso, así que hoy, en su memoria, destaco dos de sus poemas.
Calderón de la Barca
Hidalgo, soldado y sacerdote, Pedro Calderón de la Barca rubricó obras de teatro imperecederas como La vida es sueño, El alcalde de Zalamea, La dama duende o El médico de su honra. Pero también tiene una importante producción poética. Este es uno de sus poemas, una octava perteneciente a Las Comedias, la llamada El Sitio de Breda.
El soldado español de los Tercios
Este ejército que ves
vago al yelo y al calor,
la república mejor
y más política es
del mundo, en que nadie espere
que ser preferido pueda
por la nobleza que hereda,
sino por la que el adquiere;
porque aquí a la sangre excede
el lugar que uno se hace
y sin mirar cómo nace
se mira como procede.
Aquí la necesidad
no es infamia; y si es honrado,
pobre y desnudo un soldado
tiene mejor cualidad
que el más galán y lucido;
porque aquí a lo que sospecho
no adorna el vestido el pecho
que el pecho adorna al vestido.
Y así, de modestia llenos,
a los más viejos verás
tratando de ser lo más
y de aparentar lo menos.
Aquí la más principal
hazaña es obedecer,
y el modo cómo ha de ser
es ni pedir ni rehusar.
Aquí, en fin, la cortesía,
el buen trato, la verdad,
la firmeza, la lealtad,
el honor, la bizarría,
el crédito, la opinión,
la constancia, la paciencia,
la humildad y la obediencia,
fama, honor y vida son
caudal de pobres soldados;
que en buena o mala fortuna
la milicia no es más que una
religión de hombres honrados.
Anne Brontë
La menor de las tres hermanas Brontë vivió tal vez a la sombra de Emily y Charlotte, y compartió su infausto destino de muerte temprana. Su novela más conocida es Agnes Grey, pero también firmó La inquilina de Wildfell Hall. Sin embargo, también es destacable su poesía, cuya mayor parte publicó con seudónimo. Estas son dos muestras.
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