Breve resumen del libro «Luces de Bohemia» de Valle-Inclán

«Luces de bohemia» se centra en el paseo nocturno por las calles de Madrid de un poeta acabado e idealista: Max Estrella, acompañado de su amigo don Latino. Al hilo de este constante deambular, el autor satiriza a los personajes y así como a las situaciones que se van creando en torno a ellos: la vida en la taberna, la huelga, la intervención de la policía, la religión, la poesía modernista, etc.

«Luces de bohemia» termina con la trágica muerte de Max, quien representa a la perfección la derrota del idealismo y la imposibilidad de una sociedad justa e igualitaria.

Aspectos dramáticos más representativos

Los aspectos dramáticos más representativos de la obra, son:

  • Estructura. El libro se divide en 15 escenas que se encuentran unidas por el recorrido de sus protagonistas. Las escenas podemos agruparlas en dos partes: La primera parte que correspondería a las escenas de la I a la XII, conformadas por preludio que respresenta la situación, un cuerpo central que supone ese deambular de los personajes como os comentábamos anteriormente y de un final en el que se acaba esta peregrinación y se presenta la teoría del esperpento, muriendo Max. Por otro lado tenemos la segunda parte, que está constituida por un epílogo que cierra la obra. En ella se sucede la muerte de Madamme Collet y Claudinita, la cual se anuncia al principio, y se conoce el premio del décimo de lotería.
  • Espacio y tiempo. «Luces de bohemia» se desarrolla en algo más de 24 horas: desde el atardecer del primer día hasta la noche del siguiente. En este escaso tiempo dramático se recoge, desordenado, un amplio tiempo histórico. Valle-Inclán recurre al anacronismo, que le permite condensar diversos aspectos que le interesan en una misma historia. Frente a esta condensación temporal, la obra muestra una gran extensión espacial.
  • Acotaciones. En esta obra, estas tienen una gran importancia. No tienen una función exclusivamente dramática; muchas veces son de carácter literario y funcionan como un vehículo de la voz de un narrador, lo cuál aproxima la obra a la novela.

Por otro lado, si nos fijamos en los protagonistas y sus conflictos, «Luces de bohemia» cuenta con una gran abundancia de personajes, siendo la mayoría de ellos vistos de una posición esperpéntica de superioridad. Valle-Inclán dirigía hacia ellos una visión humorística agria. El autor presentó seres que se movían por su propio egoísmo, frivolidad e hipocresía.

Max Estrella, el personaje principal

Max Estrella, el protagonista de esta novela es un poeta ciego y pobre, cuyo nombre tiene un significado simbólico irónico; alude muy probablemente a la «suerte» (estrella», de la que careció siempre. La fortuna se burla de él continuamente y el ejemplo claro está en que el décimo de lotería premiado sucede justo tras su muerte. Está terriblemente abocado a un cruel destino: la desgracia.

Max representa a un intelectual idealista bohemio que no desea someterse a los intereses comerciales, sino a la calidad estética. Finalmente, acaba por darse cuenta de la inutilidad de esta actitud: vive a destiempo, sus ideales no encajan con esa sociedad y la miseria que rodea a todo lo bohemio sucumbe ante el poder del dinero de todo lo relacionado con la burguesía.

Este personaje y la madre del niño muerto o el preso, son los únicos personajes a los que Valle-Inclán «respeta» y no les aplica de forma tan grave el distanciamiento esperpéntico.

Don Latino, que acompaña siempre a Max, representa la bohemia parasitaria, inactiva y cínica.

Aspectos ideológicos de «Luces de bohemia»

Respecto a estos aspectos ideológicos, destaca la «sátira» que se realiza en torno a la propia literatura. El libro recurre a diversas citas literarias que se enmarcan en contextos burlescos y se someten a la estética deformante. También se observa en esta obra una reminiscencia satírica de «La Divina Comedia» de Dante (Max experimenta un particular descensos a los infiernos de Madrid) y también se ve en el entierro de Max como una parodia del de Ofelia, en la obra «Hamlet». Este contraste cómico entre la dura vida y la literatura tiene también un tono de desencanto y amargura.


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  1.   Forrest Franco dijo

    Luces de Bohemia es en apariencia una de esas obras que penetra en el esperpento de la vida. Busco el dramatismo cargado de aquello que te saca de este plano tangible. Hay algo más allá, accesible al decidir vagar por existencias de infinita variedad. ¿ Es esta obra ejemplo ello ? No lo se. Leeré.