El frío se resiste a llegar, el otoño casi sigue siendo verano y no cae ni una gota de agua. Miro con envidia a países más lejanos, más frescos, más lluviosos. Pienso hasta en Pekín, pero me quedan más cerca la cosmopolita capital alemana y más fría la finlandesa. Me voy a hacer tres viajes, también en el tiempo.
A recordar las primeras tres historias de ese Bernie Gunther del Berlín de los 30 y 40, creado por Philip Kerr. A invocar a milenarios dragones oscuros en el Pekín actual con la detective Mei Wang, de Diane Wei Liang. Y a acompañar a esas tres abuelas nonagenarias metidas a investigadoras en la fría Helsinki de Minna Lindgren.
Trilogía de Berlín – Philip Kerr
Denominada también Berlín Noir, esta trilogía recoge los tres primeros títulos de la serie protagonizada por el detective alemán Bernie Gunther. El escritor escocés Philip Kerr debutaba en 1989 con su primera novela, Violetas de marzo, e iniciaba también esta exitosa saga que ya va por once libros. Gunther, un exagente de la Kripo (la muy temida policía criminal del Tercer Reich), es ahora un detective especializado en buscar a personas desaparecidas.
En Violetas de marzo estamos en el Berlín de 1936, cuando la ciudad se prepara para los Juegos Olímpicos. En 1990 se publicó Pálido criminal, en la que Gunther tiene que volver a la Kipro para investigar los asesinatos de varias adolescentes ocurridos en 1938. Y en 1991 apareció la tercera parte de esta trilogía, Réquiem alemán. Ya estamos en 1947, tras el final de la guerra la derrota alemana. Gunther se ve envuelto en una enrevesada trama con los servicios de inteligencia internacionales de por medio.
Trilogía de Pekín – Diane Wei Liang
Se reúnen en un solo tomo los tres títulos escritos por la autora china (residente en Londres) Diane Wei Liang. Los protagoniza Mei Wang, una de las detectives más emblemáticas de la novela negra asiática. Esta investigadora conoce y se mueve con soltura por el Pekín moderno y lleno de contrastes.
En El ojo de jade Mei es una joven muy independiente que trabaja en una agencia privada de detectives. Un cliente le pide que encuentre una antigua piedra de jade robada durante la Revolución Cultural. Mei se verá obligada a recordar e investigar en ese oscuro periodo de la historia china que la conducirán a un secreto muy bien guardado que no interesa desvelar.
En el segundo título Mariposas para los muertos Mei Wang tendrá que investigar la desaparición de una joven estrella llamada Kaili y también seguirá la pista de una delicada «mariposa de papel» que ha descubierto en su apartamento de Kaili.
Por último, en La Casa del Espíritu Dorado, Mei conoce por casualidad a un abogado que le encarga la investigación de un caso para una empresa que fabrica píldoras capaces de curar los corazones rotos. Y al mismo tiempo un inspector del gobierno se presenta en la agencia de detectives con la orden de cerrarla.
Trilogía de Helsinki – Minna Lindgren
La escritora finlandesa Minna Lindgren creó a estas tres abuelitas nonagenarias y logró el beneplácito de crítica y lectores. Con un toque negro de misterio e intriga y también de humor. Su fórmula recuerda a la de su muy exitoso vecino sueco Jonas Jonasson. Mezcla de crítica social, humor negro y ese punto de tres señoritas Marple a la finlandesa. Las aventuras y desventuras de Siiri, Irma y Anna-Liisa, las viudas protagonistas, han hecho las delicias de muchos lectores en estos tres títulos.
En Tres abuelas y un cocinero muerto conocemos a estas amigas y residentes en El Bosque del Crepúsculo, un centro privado de apartamentos para la tercera edad de Helsinki. Pero, cuando todo parece rutina, en la residencia se producen unos misteriosos asesinatos que para tres inocentes abuelas con curiosidad y tiempo libre se convertirán en un reto a resolver.
En el segundo título, Tres abuelas y un joyero de ida y vuelta, las tres amigas ven interrumpida la tranquilidad de sus vidas por unas interminables obras de reforma en la residencia. A la vez, el joyero de Anna-Liisa desaparece sin dejar rastro. Cuando deciden mudarse a un piso compartido, surgirán los problemas de convivencia. También se darán cuenta de que esas obras son bastante sospechosas y quizás encubran actividades criminales que por supuesto investigarán.
Y por último, en Tres abuelas y un plan de sabotaje, por fin acaban las obras de mejora en El Bosque del Crepúsculo y los ancianos pueden regresar a sus apartamentos. Pero ahora la dirección está en manos de una organización religiosa de dudosa legalidad. Sin embargo, hay un tema que preocupa más a los residentes. Las innovaciones tecnológicas hacen que ya no se necesiten asistentes para los ancianos. Las tres amigas organizan un plan para destruir el sistema informático que las llevará a prisión y allí puede pasar cualquier cosa.