Edgar Allan Poe, maestro del género literario de terror, nos da unos ‘tips’ o consejos para mejorar la redacción de nuestras historias literarias y poemas. ¿Qué no sabes cuáles pueden ser? No te preocupes, a continuación te lo contamos todo sobre ello.
Coge cuaderno y lápiz y ve apuntando, y si prefieres algunos consejos de Borges, Bolaño o Hemingway, pinchando sobre ellos tendrás más información. A continuación, los 7 consejos de Edgar Allan Poe para escribir historias y poemas.
Pon un final antes de comenzar a escribir
«Nada es más claro», escribe Poe, «que cada trama, digna de ese nombre, debe ser elaborada acorde a su desenlace antes de intentar cualquier cosa con la pluma.» Una vez que la escritura comienza, el autor debe mantener el final «constantemente»con el fin de ir puliendo la obra y sus consecuencias.
Sea breve
Poe afirma que «si toda obra literaria es demasiada larga para ser leída de una sola vez, tenemos que eliminar todo aquello que sobra» ya que sino estaríamos forzando al lector a tomar un descanso y en ese intermedio se rompería el hechizo y la magia de leer.
Decide sobre el efecto deseado
El autor debe decidir de antemano la impresión que él o ella desea dejar en el lector. Poe asume aquí la gran capacidad de los autores para manipular las emociones de los lectores.
Para Poe aquellos poemas que hacen llorar a los lectores, son los mejores… ¿Tú que opinas?
Elige el tono de la obra
Poe afirma que «la melancolía es por lo tanto el más legítimo de todos los tonos poéticos.» Poe emplea, y recomienda, el uso de palabras que fonéticamente y conceptualmente sean contudentes para la obra en si. Un ejemplo de palabras bastante contundentes es «nunca más», como él mismo usaría en su poema titulado «El Cuervo».
Determina el tema y la caracterización de la obra
“La muerte de una mujer hermosa”, y “los labios más adecuados para este tema son las de un difunto amante”; Poe elige estas líneas para representar la muerte más melancólica. Contrariamente a los métodos de muchos escritores, Poe se mueve de lo abstracto a lo concreto, eligiendo personajes como portavoces de las ideas.
Establece el clímax
En “El Cuervo” Poe dice, “ahora tenía que combinar las dos ideas, la de un amante lamentando la muerte de su difunto y un cuervo repitiendo continuamente la palabra “nunca más”. Para reunirlos compuso de la tercera a la última estrofa en primer lugar, lo que le permitió determinar el ritmo, el compás y la organización general del resto del poema. Como en la etapa de planificación, Poe recomienda que el escrito “tenga su inicio en el final”.
Determina el escenario
Aunque parece un paso obvio que realiza el escritor antes de empezar la obra, Poe lo deja hasta el final, después de que ha decidido por qué colocar ciertos personajes en ese lugar donde dirán determinados diálogos. Sólo cuando ha aclarado su propósito y esbozado por adelantado cómo pretende lograrlo, coloca a los personajes en el escenario determinado.
Aunque algunos puntos de discusión de la técnica de Poe se refieren específicamente a la poesía, como su propia prosa de ficción atestigua, estos pasos pueden aplicarse por igual al arte de la narración breve. Y aunque él insiste en que las representaciones de la belleza y de la muerte, o la belleza melancólica de la muerte marca el más alto de los objetivos literarios, uno sin duda podría adaptar su fórmula, al menos obsesiva, a temas mórbidos también.
Sinopsis de la obra «El Cuervo»
Como en sus consejos, Poe menciona tanto a esta gran obra poética, hemos querido dejarte su sinopsis oficial por si te apetece leerlo si aún no lo has hecho:
El cuervo sigue a un narrador sin nombre, que al principio está sentado leyendo «un raro infolio de olvidados cronicones», con la intención de olvidar la pérdida de su amada Leonora. Un «golpeteo en la puerta de su habitación» no revela nada, pero incita al alma a «encenderse». Se oye un golpeteo similar, ligeramente más fuerte, esta vez en la ventana. Cuando el joven va a investigar, un cuervo entra a su habitación. Sin prestar atención al hombre, el cuervo se posa sobre un busto de Palas. Divertido por el comportamiento del ave, cómico y serio a la vez, el hombre le pregunta su nombre. La única respuesta del cuervo es: «Nunca más». El narrador se muestra sorprendido ante la capacidad del ave para hablar, si bien no dice otra cosa. Supone que el cuervo aprendió a decir «nunca más» de algún «amo infeliz», y que es lo único que sabe decir. El narrador comenta que su «amigo» el cuervo pronto se irá volando de su vida, así como «otros amigos se han ido volando antes» junto con sus esperanzas. Como contestándole, el cuervo vuelve a decir: «nunca más». El narrador se convence de que esa única palabra, Nevermore, «nunca más», posiblemente adquirida de un viejo amo con mala suerte, es lo único que puede decir.
Aun así, el narrador coloca su silla justo enfrente del cuervo, determinado a saber más sobre él. Se queda pensando por un momento, sin decir nada, pero su mente lo lleva de nuevo a su perdida Leonor. Piensa que el cuervo es una criatura demoníaca y le ordena que se vaya, sin embargo este no se va y se queda allí para siempre, dejando al narrador con profunda soledad y tristeza, sabiendo que «nunca más» saldrá de la sombra de la soledad.
«El Cuervo» en formato audio
Y si quieres saber como suena «El Cuervo» aquí puedes escucharlo:
Nunca mas!!! me facina Poe