Ray Bradbury nació en 1920 en Illinois, y falleció en 2012 en Los Ángeles (California). Es un escritor conocido sobre todo por sus novelas de ciencia ficción y por su libro de relatos publicado en 1950, titulado «Crónicas marcianas», el cuál le abrió puertas a revistas prestigiosas donde escribió posteriormente.
A Bradbury le preocupaba sobre todo la sociedad y la cultura, la cuál para él estaba demasiado mecanizada por el inmenso avance tecnológico, y es de lo que habla en gran parte de sus narraciones. Una de las novelas que más éxito tuvo y sigue teniendo fue «Fahrenheit 451» publicada en 1953.
Este libro fue llevado al cine de la mano de François Truffaut, y en él narra la gran influencia que posee los medios de comunicación sobre las personas, las cuáles parecen conformarse con lo que se les da sin apenas cuestionarse nada. Esto puede verse en el próximo fragmento extraído del propio libro:
“Que la gente intervenga en concursos donde haya que recordar las letras de las canciones más populares, o los nombres de las capitales de los Estados, o cuánto maíz cosechó Iowa el año último. Llénalos de noticias incombustibles. Sentirán que la información los ahoga, pero se creerán inteligentes. Les parecerá que están pensando, tendrán una sensación de movimiento sin moverse. Y serán felices,…».
En mi opinión, uno de los 100 mejores libros que existen a día de hoy.
Si esto te parece poco para recibir 10 consejos de Ray Bradbury para convertirte en escritor no sigas leyendo. Si por el contrario, te gusta este escritor, crees que tiene grandes obras y te parece valiosa su palabra y crítica literaria, sigue leyendo.
¿Cómo convertirte en escritor según Ray Bradbury?
No empieces escribiendo novelas.
Según Bradbury, el crear una novela conlleva el estar bastante tiempo frente a ella. Según su punto de vista es mejor lanzarse a escribir un montón de historias cortas, tantas como sea posible.
No se pueden escribir 52 malos cuentos seguidos.
Los puedes amar, pero no puedes ser ellos.
Fijarse en los grandes autores clásicos es normal. Los grandes maestros están ahí y los vas a intentar copiar, aunque sea de manera subconsciente. Tenlo en cuenta.
Analiza a los grandes maestros del relato corto.
Hay que seguir e imitar a Roald Dahl, Guy de Maupassant y los menos conocidos Nigel Kneale y John Collier.
Amuebla tu cabeza.
«Leer, leer y leer. Todos los días, antes de dormir, un cuento, un poema (pero Pope, Shakespeare y Frost, no la “basura” moderna) y un ensayo. Los ensayos pueden ser de una diversidad de campos, incluyendo arqueología, zoología, biología, filosofía, política y literatura. “Al final de mil noches, ¡Dios!, ¡Estarás lleno de cosas!”
Líbrate de los amigos que no creen en ti.
«No te rodees de gente que se burla de lo que escribes o de tus ambiciones literarias. Son un lastre».
Vive en la biblioteca.
«¡Nada de ordenadores!»
Bradbury era un gran defensor de las bibliotecas públicas. De los ordenadores no tenía muy buena opinión. Bradbury no fue a la universidad, pero sus insaciables hábitos de lectura le permitieron “graduarse de la biblioteca” a los 28.
Enamórate de las películas
«Y si son películas clásicas, mejor que mejor. Nada como el cine viejo.»
Escribe con alegría.
«No escribas como si de un trabajo se tratase, porque si lo haces de este modo sólo se convertirá en basura. Si empieza a suceder esto, deshecha ese escrito y vuelve a empezar. Tienes que escribir para generar envidias. ¡Que envidien tu alegría al escribir!».
Haz una lista con diez cosas que adoras y otras diez que odias
«Entonces escribe sobre las diez primeras y luego mata las diez segundas, escribiendo también sobre ellas. Haz lo mismo con tus miedos».
¡Recuerda! con la escritura lo que estás buscando es tan sólo a una persona que se acerque y te diga «Me encanta lo que haces».
O, como también dice Bradbury, una persona que se te acerque y diga «no estás tan chalado como dice la gente».
Y si aún quieres saber un poquito más de este sabio escritor, aquí te dejamos un breve vídeo (no dura más de 3 minutos) en el que podrás escucharlo y saber un poquito más sobre su opinión.
Gracias Carmen. Muy generosa al compartir tantos libros
cariños
jorge