Terror en el laboratorio, la exposición de las letras y los gritos

Dr Jekyll y Mr. Hide

La Fundación Telefónica acaba de inaugurar en el número 3 de la calle Fuencarral la exposición Terror en el laboratorio, en la cual se analizan los grandes mitos de la literatura de terror surgidos en el siglo XIX como el Dr. Frankenstein o el Doctor Jekyll y Mr. Hyde.

La exposición, la cual abre sus puertas hasta el próximo 16 de octubre, trata de focalizar en el origen de un género surgido en la mansión suiza de Villa Diodati en 1816. Fue durante el verano de aquel año, marcado por la erupción del volcán Tambora en Indonesia, cuando los cielos se volvieron de color ceniciento, obligando a los escritores reunidos en esta villa a refugiarse y recurrir a la imaginación como modo de distracción ante un mundo cuyos tejados parecían desmoronarse.

Doscientos años después la exposición Terror en el laboratorio recuerda este y otros highlights de la literatura de terror.

Monstruos de un año sin verano

En abril de 1815 el volcán Tambora, ubicado en la isla indonesa de Sumbawa, erupcionó oscureciendo los cielos del mundo y escupiendo cenizas en gran parte del planeta. Los meses que siguieron al cataclismo se vieron ausentes de sol y calor, por lo que pasó a se conocido como el año sin verano, el cual se extendió hasta 1816. Fue durante el sombrío estío de este último año cuando escritores como Mary Shelley, el poeta Lord Byron o John Polidori se reunieron para escribir en la Villa Diodati, en Suiza.

La atmósfera sombría que invadía medio mundo les llevó a sustituir los picnics junto al lago por largas estancias encerrados en una mansión en la que comenzaron a contarse historias para distraerse. De esta inventiva surgida en tan crítica situación surgirían personajes como Frankenstein y el doctor Jekyll, ambos creaciones de Shelley, o El vampiro de Polidori, todos ellos convertidos en iconos de una literatura de terror que despegaría a principios del siglo XIX hasta convertirse en  grandes referentes de las letras.

Un universo literario que vuelve a respirar a partir de hoy en el centro de la Fundación Telefónica, entidad que ha montado un particular laberinto de referencias en forma de portadas de libros, esculturas y documentos que analizan estos mitos del terror cuyo rasgo en común es, ante todo, el hecho de haber surgido en un laboratorio, motivo que excluye a otros clásicos como el conde Drácula pero que sí incluye a algunos grandes herederos de aquel año sin verano como La isla del doctor Moreau o El hombre invisibles, ambos de H.G.Wells.

Una exposición que no dejará indiferente a quienes buscan recurrir al lado más lúgubre (y atemporal) de la literatura del siglo XIX.

La exposición Terror en el laboratorio os invita durante los próximos cuatro meses a sumergiros en una literatura de gritos y experimentos surgida durante aquel verano de cenizas en el que la erupción de un volcán cambiaría para siempre el mundo de la literatura.

¿Visitarás esta exposición?


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  1.   Alberto Díaz dijo

    Hola, Alberto.
    Me gustaría visitarla, aunque no creo que pueda. ¿Sabes si rodará por otras partes de España? Sospecho que no, aunque ojalá llegase a Asturias.
    Es curioso cómo un fenómeno natural influyó de manera tan relevante en la Historia de la literatura, ya que si ese volcán no hubiera erupcionado jamás, posiblemente hoy no existirían los personajes de Frankenstein, el doctor Jekyll, Mr. Hyde o el vampiro de Polidori. Me preguntó cómo se les ocurrirían esas historias. ¿Fue simplemente un chispazo de ingenio o se basaron en algo?
    Desde Oviedo, un saludo literario.