Desde el pasado mes de octubre está en las librerías Los olvidados, de David Baldacci (1960). Es la segunda novela de la trilogía del agente especial John Puller. El prolífico autor norteamericano continua la serie de este excombatiente veterano y tal vez el miembro más experto del Departamento de Investigación Criminal del ejército estadounidense.

Para los más profanos en Baldacci seguro que les puede venir a la memoria la adaptación cinematográfica que hizo Clint Eastwood de su novela Poder absoluto (1997). Recordemos que Baldacci también es guionista. Y sí, sus thrillers son al uso, pero tienen pegada, en esta serie hay un buen protagonista y es entretenida. No hay que pedir mucho más si es eso lo que se busca. A ver si se publica pronto el tercero.

Trilogía de John Puller

Puller no es de los mejores, es el mejor. Veterano de guerra en Oriente Medio es agente especial del ejército norteamericano y sus mandos confían plenamente en él para investigar los delitos más complicados y peligrosos que puedan afectar a la seguridad nacional. Metódico, disciplinado, siempre en forma…

O sea, maquinaria militar siempre a punto. Ah, y dueño de un gato. También tiene un hermano mayor, Robert, que es militar como él, un genio informático y que cumple cadena perpetua por traición. Pero algo no está claro en esa condena y Puller se empeñará en averiguar qué es durante toda la serie.

Están muy marcados por la figura de su padre, un muy reconocido y condecorado militar, ahora enfermo y recluido en una residencia. Puller lo visita con frecuencia, pero la relación con él es difícil porque su padre a veces no lo reconoce y lo trata como a un soldado a sus ordenes. En cualquier caso, para Puller lo importante es el deber y a él se atiene, aunque luego pueda usar métodos más o menos ortodoxos.

1. Día cero 

En esta primera novela Puller tiene que investigar un caso en una zona rural y muy aislada de la región minera de Virginia Occidental. Han asesinado a una familia entera y la joven inspectora de Homicidios de la policía local trabajará codo con codo con Puller.

Por supuesto la investigación se irá complicando a medida que atan cabos. El final mantiene la tensión de forma muy lograda y no falta el toque dramático.

2. Los olvidados

En esta segunda novela recién publicada, Puller va a Florida a resolver un caso personal: han encontrado muerta a su tía, que vive en Paradise, una ciudad costera y muy próspera por el turismo rico que la visita, atraídos por sus fabulosas playas y un clima espectacular. La policía local ha concluido que la muerte, una aparente caída, ha sido accidental. Pero antes de morir su tía le envió una carta al padre de Puller, donde le contaba que Paradise no era lo que parecía. Cuando Puller empieza a investigar, descubre que la muerte de su tía está lejos de ser un accidente.

3. The escape

Que me imagino que cuando la publiquen se titulará La escapada o La fuga, porque de eso va, de una fuga, pero una muy especial. John Puller verá que su todo su entrenamiento, experiencia y habilidades no le sirven de nada cuando tenga que ser él quien busque a su hermano Robert, que ha escapado de la prisión de máxima seguridad donde está.

Su inexplicable fuga lo convierte en el criminal más buscado del país y quién mejor que su hermano para capturarlo vivo. Pero Puller descubre pronto que a su hermano lo busca más gente que lo quiere muerto. Además, le asignan una agente como compañera que se lo pone bastante difícil y podría tener su propia manera de llevar el caso.

El asunto se complica no solo por la relación profesional (y algo más) entre Puller y su compañera, sino por las cada vez más claras pruebas de que a su hermano lo condenaron injustamente. Y alguien no quiere que se sepan todas las verdades.

Veredicto

La serie va ganando en cada uno de los libros y el tercero es un buen colofón para rematarla o retomarla en un futuro si Baldacci quiere. Así que la recomiendo si a uno le gusta pasar un buen rato con lectura fácil, entretenida y buenas dosis de acción y tensión.

Para saber más, lo mejor es visitar la web de David Baldacci.